La curiosidad mató al gato
Escuchá, escuchá... hay un ruidito.
suena como...
...Es eso un oboe?
...puede ser.
Una vocecita, finita, finita, consigue mi atención. El oboe hace un crescendo, claramente toca en Re Menor. La voz. La vocecita tiene mi atención. (Dónde estaba yo antes? antes de la voz?) La voz tiene toda mi atención.
Quien porta la voz que tiene toda mi atención (Quién es el que porta la voz que tiene toda mi atención?) Usa esa voz para expresar su atención hacia mí. Al oboe se agregan
unos timbales
una viola
un contrabajo
un trombón.
La atención de la persona cuya voz tiene toda mi atención está posada sobre mí o eso es lo que dice Fortissimo de la orquesta que no sé de donde viene ni si está consciente de lo que sucede en este plano pero la voz dice fuerte y clara tal vez demasiado fuerte o demasiado clara porque casi que duele un poquito y dice
Quisiera preguntarte--
Wow, qué loco. La atención de la atención posada en mí, metaatención y un remolino de interés.
Oboe, timbales, viola, contrabajo, trombón a todo lo que dá, me aturden completamente.
luego
todo
se
congela.
no! quiero de vuelta la música, la atención en la atención, quiero ver cómo se desenlaza todo!
[Absolutamente nada]
Desde ese momento en más, siempre me prégunté qué quisieron decir el oboe, los timbales, la viola, el contrabajo, el trombón, mi atención, la atención, la voz de aquella persona.
Todavía siento el eco del oboe sonando en mi nuca, como si me acariciara con una pluma, con intenciones de irritarme.
Todavía tengo alguna parte de mi atención destinada a aquella persona, espero impacientemente que su atención vuelva a posarse en mí, vuelva a sonar la orquesta, y esta vez complete su pregunta.
Otras partes de mí quieren convencerse de que todo fue ficticio. Que aquella persona sólo jugaba con mi atención, que nunca tuvo algo real para preguntarme pero que disfruta mi locura, mi impaciencia.
Pero no puedo evitar
escuchar el eco del oboe
todavía no entiendo la melodía
(siempre la toca incompleta)
como si todo lo que supiera decir
fue lo que ya dijo
en aquel momento.
y el oboe
cosquillea y cosquillea en mi nuca
y
cada vez
que le presto atención a la melodía
hasta el trombón vuelve
sólo quiero saber
cómo termina la melodía
y volver a dormir en paz.
1 Comments:
Me alegra haber sido la persona que pusiera la gota que derramo esta locura... o la que te empujo hacia el precipicio de tu imaginacion para lograr una compulsion nerviosa tuya...
Saludos de parte del gato, que safo porque justo cuando iba a mirar le pase cerca con la aspiradora cosmica del karma.
Adio.
Post a Comment
<< Home