explicaciones.

hmmm todo esto me quedó zumbando en la cabeza desde que sucedió. y cuando
te hablo en mi cabeza y sos parte de mi mente no tengo problema en explicártelo
las veces que quieras, tanto antes como después de que lo hablara con vos mismo.
es una conversación recurrente. millones de veces te expliqué en mi mente mis
filosofías, mis convicciones y mis alucinaciones. y te las expliqué en mi mente porque
cuando estoy cerca tuyo, del que sos en carne y hueso y perfume, no se me ocurre
contártelo o me siento rechazada o estoy demasiado ocupada disfrutando de ese
silencio denso que se forma a veces entre nosotros y que tanto me encanta. y para
muchas de las cosas que te dije hay una explicación y para algunas de esas cosas
hay muchas explicaciones, todas contradictorias, variando según el día y la hora y el
viento. pero bueno, debería explicartelo eventualmente porque me molestan
bastante los malentendidos. La cosa es que tengo un cierto orden de prioridades
más o menos establecido y más o menos fuera de lo normal. Mi orden de
prioridades considera muchas prioridades, muchos aspectos en los que pienso
recurrentemente y reformulo en la marcha. Así que sería bastante pretencioso
enumerártelo como maquinita, o en un top ten de prioridades. Muchas de ellas
surgieron por necesidad y otras por conveniencia y otras por definición, pero la
naturaleza de ellas es cambiar, como todo lo que está en mi cabeza. A lo que nos
compete, mis prioridades se ordenan de mayor a menor en: hacer lo que me surge
hacer, hacer lo que quiero hacer, no esperar nada de nadie, favorecer la libertad, no
ser egoísta. y lo más importante es lo que me surge y lo que no. lo que soy y lo que
no soy. nunca fui celosa porque toda la vida tuve una forma de ser monógama, sin
forzarme. mientras te quiera, no voy a poder envolverme sentimentalmente con
nadie. no porque me lo imponga, no porque te deba algo: sino porque no me surge.
nunca tuve celos porque no sé lo que es sentirse atraído por otra persona que no es
la que tenés al lado. y tampoco me sucedió que quien eventualmente tuve al lado se
sintiera atraído por otra persona. hace poco fui víctima de los celos, fundados o no. y
sé lo poco lindo que es eso, y esa experiencia sumó más argumentos a la convicción
que trato de explicarte de una manera tan inconexa. la segunda prioridad es lo que
quiero. lo que quiero es tenerte cerca. así de simple. no hay muchas vueltas ni letras
pequeñas. tenerte cerca me gusta. no espero nada. esa es la tercera prioridad. no
porque sea emo, ni porque sea conformista. simplemente no espero nada de nadie
excepto sobre mí. por supuesto que quiero cosas de vos. por supuesto que me
gustaría que hagas ciertas cosas. pero no espero que las hagas, ni ahora ni nunca.
lo máximo que puedo hacer es pedirte, sin esperanzas. así, si pasa, es una
verdadera sorpresa. un regalo. lo que me lleva a la próxima prioridad. sos libre de
hacer lo que tengas ganas de hacer. incluso lo que no me gustaría que hagas. no lo
digo como las madres suelen decir 'hacé lo que quieras' cuando se cansaron de
discutir. lo digo genuinamente. tu disfrute y tu libertad es lo mejor que podés
regalarme, si querés hacerlo. ojo con eso: no espero intervenir voluntariamente en lo
que te hace bien, mis acciones no tienen como objetivo primordial complacerte. si lo
hacen, mejor. pero no busco complacerte porque eso es problema tuyo. no quiero
que seas libre porque es mejor para vos: lo quiero porque es mejor para mí, porque
de verdad me hace bien. con lo que llego a la quinta y última prioridad de las que te
hablo. trato de, después de todo lo que viene antes, no ser egoísta. te quiero para
mí, ya te lo dije. pero vos no podés ser mío ni yo puedo ser tuya. yo soy del
universo y vos andá a saber a quién o a qué pertenecés. tal vez a vos mismo o a tu
trabajo o a tu voluntad, no lo sé y tal vez en algún momento esté interesada en
averiguarlo. a tu pregunta de si me molesta que salgas o estés o te enamores de
otra persona, te respondo que no. si es lo que vos querés hacer y lo disfrutás. es lo
que verdaderamente quisiera? no. qué pasaría si lo hicieras? nada, o todo. no soy
adivina. ya te comiste algunas histerias mías, vienen fácil y se van fácil. están y no
están. lo que te aseguro es que nadie te va a hacer un desplante, no es mi estilo. lo
que te aseguro es que no me voy a enojar, no sabría cómo enojarme. lo que te
aseguro es que lo voy a disfrutar, tanto por verte feliz como por la histeria. todo
esto que te escribo lo dejo acá en el blog. lo escribo porque no tengo la seguridad de
que lo vayas a leer. sospecho que sí, pero prefiero la ignorancia. y si lo leés,
bienvenido seas. si no, bienvenido seas también. porque no tengo que explicarte
nada a vos, ni a mí. sólo registro lo que me zumba y juego con las posibilidades.